“Haz de mí, Señor, un instrumento de tu paz”. 

Desde el miércoles 27 de mayo al viernes 29, vamos a estar publicando distintas actividades en torno a la fiesta de Pentecostés.

El sábado 30 de mayo, a las 16 h, vamos a tener un encuentro vía Zoom entre los que se quieran sumar. ¡Inscribite haciendo click acá! Así te enviamos el link de acceso.

Apretá los botones para encontrar las actividades por día:

Miércoles 27 Jueves 28 Viernes 29 Sábado 30


Sobre el lema y Pentecostés:

“Haz de mí, Señor, un instrumento de tu paz”.

En Pentecostés recibimos al Espíritu Santo, eso nos transforma en instrumentos de Dios.
Pensemos en un instrumento musical, es un objeto que sirve para tocar diversas melodías. El instrumento por sí solo no “suena”, necesita de un músico que lo toque.
Existen miles de ritmos musicales, un mismo instrumento puede tocar miles de canciones. El instrumento no sabe lo que es capaz de hacer, ni de lo lindo que puede sonar, para eso necesita de un músico que lo toque, que se sirva de él para llegar a los oídos de la audiencia.
Pensemos en Dios como este músico, quien nos creó, él nos soñó y sabe todas las melodías que podemos tocar. Cada instrumento fue creado para un propósito, tiene su melodía perfecta, en la cual va sonando diferentes ritmos en diferentes tiempos.
Si ofrecemos los dones que tenemos, todo eso que sabemos hacer, en otras palabras si “sonamos” si de nosotros va brotando la “melodía perfecta”, significa que estamos cerca del músico. Es Dios quien nos hace sonar, quien sopla sobre nosotros con su Espíritu Santo.

Jesús ascendió a los cielos y nos dejó su Espíritu para que no estemos solos, lo dejo para quedarse con nosotros y para poder guiarnos, si queremos escucharlo solo hay que cerrar los ojos y sentir nuestro corazón latir, poder identificar en qué dirección late y hacia dónde nos envía, la famosa “corazonada”.
En Pentecostés recibimos el don Espíritu Santo, don porque es un regalo de Dios, Él habita en nuestros corazones y gracias a que “sonamos” llega a quienes nos rodean.
Nos transformamos en instrumentos de Dios cuando llevamos armonía al caos, cuando tenemos la mente en calma para responder con paciencia a los conflictos, cuando perdonamos a quien nos lastima, cuando mantenemos la tranquilidad y no entramos en pelea sino que ponemos la otra mejilla, cuando llevamos amor a donde solo parece haber odio, esto nos vuelve instrumentos de paz en este mundo.

En estos días vamos a invitarlos a recorrer diferentes espacios en donde hoy mismo se nos da la oportunidad de ser instrumentos de Dios. 

Oración de San Francisco de Asís 

Haz de mí, Señor, un instrumento de tu paz.
Que donde hay odio, ponga yo amor.
Donde hay ofensa, ponga yo perdón.
Donde hay discordia, ponga yo unión.
Donde hay error, ponga yo verdad.
Donde hay duda, ponga yo Fe.
Donde desesperación, ponga yo esperanza.
Donde hay oscuridad, ponga yo luz.
Donde hay tristeza, ponga yo alegría.
Haz, Señor que antes búsque yo dar que recibir consuelo.
Ofrecer que recibir comprensión.
Amar que ser amado.
Porque sólo olvidándose de sí se encuentra uno a sí mismo.
Sólo perdonando, como se es perdonado.
Sólo en la muerte nos despertamos a la vida.
Amén.

Musician playing on acoustic guitar